Cuando algo que iba en línea recta ha empezado a tener curvas y, de un día para otro, una de estas curvas fue tan pronunciada que te dejo justo donde empezaste, ¡abre los ojos! Es la vida que te ha hecho dar una vuelta y te pregunta silenciosamente si es que quieres volver a recorrer ese camino que tú ya conoces y que te llevará al mismo lugar: Al principio
Lo anterior es un círculo. Nosotros en nuestra humana terquedad no queremos verlo, todo nos muestra que es un círculo, pero no queremos verlo porque creemos que las cosas pueden ser diferentes y sin darnos cuenta terminamos en una espiral… una espiral que puede convertirse en infinita si es que cada vez que volvemos al principio pensamos que podemos hacer las cosas diferente y nuevamente intentamos.
La vida no debe estar plagada de espirales, sino de círculos. Cuando nos demos cuenta que volvimos al principio, debemos cerrarlo, verlo como un aprendizaje, y cerrarlo definitivamente. Una vez cerrado, debemos movernos a un costado… y empezar a recorrer un nuevo camino, una nueva historia.